Realizar ejercicio físico es uno de los mejores hábitos para nuestra salud ya que nos aporta numerosos beneficios. Pero, ¿cuándo es mejor practicarlo? ¿Por la mañana o por la tarde?

Lo cierto es que son muchas las variables a tener en cuenta  a la hora de elegir una hora para ejercitarse. Entre ellas, el ritmo circadiano, que va a determinar cuándo nos sentimos mejor, más despiertos y con más ganas, para hacer deporte. Además, otras variables que determinarán nuestra hora de entrenamiento, serán nuestros hábitos, nuestro horario laboral, o nuestro horario familiar.

Sin embargo, según el objetivo físico que te hayas propuesto, hay horas más idóneas que otras para realizar tu entrenamiento:

Entrenamiento de Resistencia aeróbica.

La resistencia aeróbica es la capacidad del organismo para mantener una alta intensidad de ejercicio durante un largo periodo de tiempo gracias a la adquisición continua de oxígeno. No importa a qué hora del día realices este tipo de ejercicios, ya que la respuesta corporal ante la resistencia aeróbica, es la misma durante todo el día.

Entrenamiento de resistencia anaeróbica.

La resistencia anaeróbica, es aquella en la que se trabaja en alta intensidad y en corta duración. Por la tarde, a partir de las 18:00, la temperatura corporal es idónea para trabajar este tipo de entrenamiento.

Masa muscular.

Si lo que buscas es ganar masa muscular, los mejores resultados se obtienen si se entrena por la tarde. Los niveles de cortisol, hormona que lastra el desarrollo muscular, son mayores por la mañana, por lo que la tarde se presenta como el mejor momento para entrenar.

Pérdida de grasa.

El metabolismo disminuye conforme van pasando las horas, por lo que si entrenamos por la tarde, provocamos una reactivación del metabolismo que nos ayudará a quemar más calorías, y por consiguiente, facilitar la pérdida de grasa.

Por lo tanto, según tu objetivo, puedes decidir cuál es la mejor hora para ti para entrenar, aunque, siempre dependerá de cuándo te sientas más a gusto y con más ganas de hacerlo. Lo único que deberás tener en cuenta es que si decides ejercitarte por la mañana, tendrás que despertar tu cuerpo, a fin de evitar lesiones, por lo que el calentamiento será fundamental. Igualmente, si vas a entrenar al anochecer, lo aconsejable es no practicar deportes a muy alta intensidad, ya que conciliar el sueño te resultará más complicado.